Plato frito que requiere control del contenido en grasas y la temperatura.
Control de la grasa y el acrilamida: El mejor método de preparación es hornear o utilizar un horno de convección con una cantidad mínima de aceite, en lugar de freír. Si fríe, hágalo con aceite fresco con un punto de humeo alto y evite freír hasta que adquiera un color marrón oscuro para minimizar la formación de acrilamida.
Control de la humedad: El calabacín suelta mucho líquido. Es necesario escurrir bien el calabacín y las patatas ralladas antes de formar las tortitas, para que no se deshagan y no absorban mucho aceite.
Almidón resistente: Enfriar las patatas cocidas antes de utilizarlas en el relleno aumenta el contenido de almidón resistente.
Absorción: Servir las tortitas con crema agria o yogur (fuentes de grasa y probióticos) mejora la absorción de nutrientes.

